El trabajo de los psicólogos, tanto en Palma de Mallorca (Baleares) como en cualquier otro sitio, no es el de focalizar la atención en todo aquello que "no funciona o genera ansiedad", sino el de encontrar aquellas variables que pueden aumentar el bienestar en cada cita. De hecho, cuando alguien me pregunta a qué me dedico, no respondo: soy psicólogo, sino que me gusta responder que ayudo a las personas que confían en mi a que puedan aprender a ser felices, y a potenciar lo mejor de sí mismas en cada cita en el centro.